REVISTA
ESPAÑOLA DE Vol. 42, n.º 2, 2009 |
EDITORIAL
Mis primeras palabras en público, no pueden ser sino de agradecimiento y compromiso.
Agradecimiento a todos los que desde un principio han confiado en mí como candidato y han realizado esa apuesta personal cuando, me consta, también se han barajado nombres de otras personas con capacidades y cualidades bien dignas para presidir la Sociedad Española de Citología.
En segundo término debo agradecer a los miembros de esta honrosa Sociedad por haberme dado su confianza para ejercer esta función de presidente.
En este momento están en mi recuerdo las personas que me han animado y apoyado para que me presentase a esta presidencia. A ellos muchas gracias.
Agradecimiento, en fin, a mis predecesores en el cargo, por su trabajo al frente de la Institución durante estos años, por el alto lugar en que la dejan.
También mi agradecimiento a las personas que han decidido acompañarme y compartir conmigo protagonismo en esta junta directiva.
Gracias a los que pudieron ser y no fueron, al no presentar sus candidaturas, me hicieron más fácil el camino.
Agradezco sinceramente a todos ellos su confianza y me comprometo a hacer mis máximos esfuerzos para no defraudarles.
El segundo termino al que me quiero referir es «compromiso». Mi compromiso es, con todo lo que esta Institución representa, que es y estará siempre abierta a todos, tratando de ser lo más accesible y cercana posible, deseando que se nos vea como elementos de ayuda y colaboración.
Esta junta directiva tiene como prioridad la promoción y defensa de sus intereses con espíritu aperturista a todas aquellas iniciativas de cualquier tipo que puedan suponer un avance.
Es evidente que la formación continuada en citopatología, ha de ocupar una de nuestras prioridades. Debemos instrumentar las acciones necesarias para ello y establecer unos sistemas eficaces.
Está en nuestro ánimo buscar puntos de unión que incrementen las líneas de colaboración con la SEAP y para ello vamos a dar los pasos necesarios. Es preciso una buena sintonía para participar en proyectos comunes cuando ello sea posible.
La Revista Española de Patología es el instrumento de la difusión de esta área del saber. Tenemos previsto apoyarla, fortalecerla y elevarla aún más, ya que se encuentra en un prestigioso momento, cuestión que debemos al denudado tesón y esfuerzo aportado por sus directores. Que sea cada vez más importante es nuestro deseo, y aunque a esta tarea dediquemos nuestro esfuerzo, tenemos además que solicitar la colaboración de todos.
Entiendo que la SEC está en un excelente momento ya que los anteriores presidentes han sabido lanzar concretar y desarrollar un proyecto ilusionante. Creo que han sido unas gestiones eficaces, decididas, modernas y comprometidas, sabiendo dar respuesta especializada y por ello específica a los problemas concretos de la citopatología.
Por las aportaciones personales de los anteriores presidentes a la hora de desempeñar el cargo la Sociedad debe saber, que de sus maneras de ejercer la presidencia, se ha derivado un beneficio para toda la Sociedad posibilitando muchos de los logros de este colectivo profesional.
En estos momentos la Sociedad goza de un importante patrimonio, no me refiero al aspecto económico sino a los aspectos social y científico.
En el aspecto científico nuestros congresos, reuniones, cursos y otras actividades científicas, tienen un excelente nivel, superponibles a los actos europeos e internacionales. También estamos viendo cómo los citopatólogos españoles, cada vez con más frecuencia, nos representan muy dignamente en los foros internacionales.
En el aspecto social todas las actividades de la SEC, cada vez más abundantes, son muy concurridas y con un excelente ambiente.
Por ello creo que es necesario apostar por la continuidad, manteniendo en lo fundamental las mismas inquietudes, los mismos esquemas de funcionamiento y de ser posible también contar con las mismas personas.
Me acompañan en el grupo directivo personas de gran experiencia, su preparación, dinamismo y cualidades personales y humanas avalan, sin ningún género de dudas su elección. La experiencia de estos últimos años como miembros de la junta directiva les ha convertido en unos profundos conocedores de la realidad de nuestra Institución y, por lo tanto, les sitúa en las mejores condiciones para impulsarla.
Se incorporan a la junta directiva dos personas que tienen, una larga trayectoria profesional y un curriculum que, indudablemente, garantiza que su contribución sea particularmente interesante y complementaria con el perfil del resto de los componentes de la junta.
El primer congreso conjunto de las Sociedades Españolas de Anatomía Patológica y Citología celebrado en Sevilla, que ha supuesto un rotundo éxito, ha sido considerado por muchos como una necesidad, que ya había sido señalada en una editorial por los Drs. Ariza y Sáenz de Santamaría, y me uno también al deseo, de cómo ha sido citado por muchos y deseado por todos, de que cada vez tengamos más actividades conjuntas, si bien es también voluntad de la mayoría de los socios, que la SEC se mantenga como tal Sociedad. He de felicitar al Dr. González Campora por la organización y desarrollo de tan extraordinario congreso, e igualmente a los Drs. Ariza y Sáenz de Santamaría por la confección científica del mismo con un programa tan atractivo intenso y completo.
Espero estar a la altura de la carga que se me encomienda, y deseo tengamos la suficiente habilidad y capacidad para continuar con el mismo desarrollo que se ha mantenido hasta ahora, la Sociedad es de todos por tanto debemos trabajar mancomunadamente por su prestigio y nuestra especialidad dependerá de lo que los citopatólogos queramos que sea.
Ernesto García Ureta
Complejo Hospitalario Universitario A Coruña